“El próximo día 20 de Noviembre estamos todos convocados a las urnas. Los obispos ofrecemos a los católicos algunas consideraciones que ayuden al ejercicio responsable del deber de votar, para la justa toma de decisiones….” Conferencia Episcopal Española. Aleluya, Santos Juanes Cullera 6/11/2011
“El sentido de la vida esta en la incapacidad que tiene nuestra cultura para ir hasta el fondo de la persona. Carlos Osoro Arzobispo de Valencia. Aleluya, Santos Juanes Cullera 6/11/2011
“Es mejor ser ateo que católico hipócrita”. “Los ateos pueden ser buenas personas”. Papa Francisco.
Lo religioso es un proceso ligado a la naturaleza humana que explica su extensión a la gran mayoría de personas, razas, etnias, Oriente y Occidente. Procede de la cultura expresada en el desarrollo de los pueblos a través de la historia. De aquí derivan sus diferentes ritos, la referencia a distintos tipos de dioses, o situaciones sobrenaturales que premian o castigan evocando argumentos de muy difícil comprensión si estimamos la importancia de la capacidad e inteligencia de los seres humanos. Numerosas ordenes religiosas, sectas u organizaciones surgen convencidas de poseer una verdad absoluta de raíz divina y seguir a un líder carismático que nunca se dedicó a lo que ahora quieren desarrollar. Uno de los instrumentos utilizados por las religiones monoteístas como la Católica es la utilización del miedo unido a creencias que han provocado un agnosticismo cívico y razonable, que procede de tres consideraciones : a)las creencias estructuran nuestro carácter y deberían ser susceptibles de argumentación, b) la imposición de esas creencias con coacciones, limitan la libertad para transformarte en un hereje si no las aceptas con las consiguientes condenas en una variedad de fuegos, los pasados en la inquisición y los futuros de la vida eterna, c) este tipo de creencias no las pueden incorporar las personas conscientes pero tampoco pueden entender el beneficio para la humanidad. (“un solo Dios en tres personas”). Los conocimientos actuales desarrollados por hombres y mujeres orientan las creencias hacia su comprensión mediante las neurociencias, la experimentación, la psicología, la sociología y la historia. Múller pensaba que “quien solo conoce su religión, no conoce ninguna religión”. Para la comprensión de estos procesos seria importante que su desarrollo teológico e histórico tuviese aportaciones internas y externas a la propia organización.
Numerosas ordenes religiosas se han creado como comunidades, en las que se consagra la vida a Dios a través del seguimiento de ciertas reglas basadas en el carisma de su fundador. Estas situaciones, que parten, de remotas idealizaciones de un líder, se han visto reducidas ante la profesionalización de la enseñanza, la enfermería y los estados de bienestar procedentes de la socialización. Las acciones basadas en la caridad son imprecisas porque exigen hoy actuaciones solidarias para reducir la injusticia y la desigualdad y una compasión activa y no lastimosa, para interpretar el sufrimiento e incidir en su control.
La Compañía de Jesús y la Iglesia Católica han sido dos sistemas que han utilizado la religión, con estructuras diferentes, pero con un denominador común que es la manipulación de las mentes para obtener un poder mucho más cerca de lo terrenal que de lo divino. Entre ellas ha existido un mutuo control, expresado en dos lideres el Papa “negro” los jesuitas y el Papa “blanco” por parte de la jerarquía eclesiástica, hasta lograr en Bergoglio, el primer Papa jesuita integrador de ambos poderes. Tanto los Jesuitas como la Iglesia Catolica pertenecen a dos organizaciones sin mujeres, con problemas sexuales y económicos importantes que en el Vaticano ha obligado a plantear auditorias sobre sus dos bancos COSEA y APSA ante la desaparición y fraude en diversas cuentas y la dificultad para la restauración de Iglesias que solo en Roma son 900, prácticamente vacías. La pasión por el poder de los jesuitas, procede de su fundador Ignacio de Loyola (siglo XVI) que era militar y que adoptó los términos de Compañía y General para la organización y para su líder. Los jesuitas fueron expulsados de España en la época de Carlos III (“Despotismo Ilustrado”), por provocar motines y de forma especial el del ministro Esquilache. Sin embargo hay que reconocerle a la Compañía de Jesús su rechazo al nacismo a diferencia de Pio XII, su enfrentamiento al Opus Dei y el desarrollo de la Teología de la Liberación que Ignacio Ellacuria desarrolló en medios sociales deprimidos, sobre teorías marxistas, ante las que a Bergoglio no le han permitido definirse.
La información detallada del Vaticano se encuentra en libros editados en los últimos años : Avaricia y Lujuria de E. Fittipaldi, Via Crucis de G Nuzzi y El libro negro del Vaticano y los Papas y el sexo de E. Frattini. Habrá católicos que se sorprenderán de que todo ello suceda, otros lo conocen perfectamente y se encuentran en esa impunidad de lo que el filosofo Bertrand Russel y Lucrecio consideraron como “la religión, una enfermedad nacida del miedo y una fuente de indecible miseria para la raza humana”. Estas situaciones también tienen sus adeptos. Es esa historia en continuidad de las guerras de religión, la inquisición, la venta de niños, la pederastia y el refugio y lobby de un 50% declarados gays entre los miembros del Vaticano como recientemente ha señalado el sacerdote gay K.Charamsa. Esa Iglesia incrustada en el Estado en España, recauda 249 millones de IRPF al mismo tiempo que el Sr. Rajoy reparte más de un millón de euros entre asociaciones homofóbicas y ultracatólicas y además recibe más de 11.000 millones de euros anuales del Estado.
El OPUS DEI fue fundado en 1928 por un sacerdote que fue bautizado como José María Escrivá Albas y murió en 1975 como Josemaria Escriba de Balaguer y Marques de Peralta. Dios se le apareció y le pidió que difundiese en todo el mundo la llamada universal a la santidad. El Opus Dei copio parte de la estructura de los jesuitas e intento que solo lo formasen hombres, pero de nuevo Dios le indicó que se extendiera a mujeres. La exclusión de mujeres, por jesuitas y Vaticano, no respondía ni siquiera a la etapa de Jesús, pero su exclusión ya le pareció a Dios como un hecho antinatural e incluso perverso de presente y en sus consecuencias.
El libro que escribió Escivá se denomina Camino. Contiene 999 máximas y solo me limitaré a relatar cinco de entre ellas:
Máxima 946- Ellas (las mujeres) no hace falta que sean sabias, basta que sean discretas.
Máxima 653- ¡Que ejemplo de discreción nos da la Madre de Dios!. Ni a san José comunica el misterio.
Máxima 457-¿Quién eres tu para juzgar el acierto de un superior?,¿No ves que el tiene sobre todo una gracia especial, gracia de estado y ayuda poderosa de Dios?
Máxima 16- ¿Adocenarte tu? ¿¡ Tu del montón!?, ¡Si has nacido para caudillo!
Máxima 28- El matrimonio es para la clase de tropa y no para el estado mayor de Cristo.
Estos criterios y numerosas otras consideraciones permiten sugerir su desprecio por la mujer, un ensimismamiento sobrenatural, una soberbia perversa y en resumen una mente enferma y con orientación psicopática que exigió un internamiento de cinco meses en un manicomio ( Jon Kepa. La verdad sobre el Opus Dei). El sucesor de Escrvá, Sr. Echevarría señalo que los que nacen discapacitados se deben a practicas sexuales pecaminosas de los padres. Esta perversión recuerda al concepto esgrimido por la Iglesia Catolica de enfermedad-pecado y que recientemente volvió a surgir respecto al cáncer de páncreas de una persona digna como fue Pedro Zerolo.
Mujeres y hombres que abandonaron el Opus Dei y distintos autores, han aportado y dejado un testimonio de “terror” el libros y artículos: I. de Armas, Ser mujer en el Opus Dei; A. Esquivias, El Opus Dei: el cielo en una jaula; J.R. Martinez Robles, Naturalez criminal del Opus Dei; M.C. Tapias, Tras el umbral, una vida en el Opus Dei. Agustina Lopez de los Mozos relato su historia desde que ingreso en la “Obra” a los 17 años, hasta que se escapó 9 años después. Aspectos de su estancia en esta secta comprende inicialmente un reconocimiento por médicos de la Obra, su actividad fue la búsqueda de afiliados, le proporcionaron un alambre trenzado con puntas (cilicio) que aplican en el muslo a la altura de la ingle, durante 2 horas cada día menos domingos y fiestas, que dejaba heridas que nunca cicatrizan y que obliga a llevar faldita en verano. Se trata de mortificar al cuerpo iniciando el día con una ducha helada, dormir sobre tablas y en ocasiones utilizar guías telefónicas como almohada. Las mujeres no pueden usar pantalones y a diferencia con los hombres no pueden fumar ya que les explican que los varones necesitan ciertas compensaciones y las mujeres necesitan meter el cuerpo en vereda porque es una fuente de tentación. Para ello los sábados disponen de un látigo de cuerda que termina en varias puntas con las que azotan sus nalgas. En un momento determinado el cura asignado por parte del Opus te indica que hagas una “incorporación jurídica” que denominan “oblación” y que consiste en una consagración para realizar los “votos” de pobreza que consiste en que tu herencia pasara a la Obra, el de obediencia para que no tengas un pensamiento critico y te manipulen y el de castidad para contrastar con la lujuria improductiva que reina en estas organizaciones y en el Vaticano.
Pero lo más grave sucede cuando te limitan tu libertad de lectura e invaden tu vida privada vigilándote, eligiéndote un confesor del Opus que te confiesa y absuelve rápidamente y a partir de ahí inicia las preguntas que fuera de ese secreto de confesión comunica a sus superiores. La “confesión” es un acto tan privado que no necesita curas intermediarios y que como en el caso de esta secta sirve para manipular tu mente, conocer tus debilidades y luego perdonarte en un acto de superioridad. Cuando estas personas salen del Opus, cada una como puede, su destino en la mayoría de los casos es el psicólogo.
No obstante a estas maldades, su obsesión son las Cátedras de Unversidad en donde algunos hemos experimentado como opositores y como miembro de tribunales. El fin es alcanzar el poder político para conseguir que el nefasto Escrivá sea santo. La introducción en política se consiguió en la etapa franquista cuando Laureano López Rodó intervino en la infidelidades de Dª Carmen Pichot, esposa de Carrero Blanco. Esto permitió la entrada en el gobierno de Alberto Ullastres, Mariano Navarro Rubio, Vicente Mortes, Gregorio Lopez Bravo y numerosos altos cargos de la Obra. Este éxito le permitió a Escrivá decir aquella frase de ¡Ya somos ministros!. Esta invasión del catolicismo más o menos ligado al Opus se ha continuado con de Guindos, Morenes, Cañete, Montoro, Fernandez Díaz, Ana Mato, Garcia-Margallo, Ana Pastor, Wert o Fátima Bañez. Por ello no debe sorprendernos, aunque si indignarnos de las condecoraciones a vírgenes y otros desmanes impropios de un sistema democrático y de la aplicación de una razonabilidad elemental.
Al final de esta historia habría que llegar a conseguir la santidad para Escrivá y sus sucesores. Es curioso observar que Juan XXIII tardo 51 años en ser santo y Escrivá solo 27. El record en tema de santidades lo tiene Juan Pablo II, beatifico a a 1340 personas, hizo santos a 483 con sus correspondientes milagros y el solo tardo 9 años en alcanzar la santidad. La pregunta surge ante la necesidad de entender estas divinidades. Todo se encuentra perfectamente organizado en la denominada “fabrica de los santos” del Vaticano creada por Sixto V en 1588. Se trata de un grupo de teólogos, médicos e historiadores nombrados por “La Casa”, sin ningún control externo, para poder detectar milagros y plantear los ingresos económicos de “la santidad”, tanto más elevados cuanto mas difícil resulta conseguir o inventar los datos “necesarios”. Los santos americanos son más costosos que los europeos y las cantidades oscilan entre 71.000 euros y cerca de 400.000 euros como fue el caso del proceso de Emil Kapaun. Por lo tanto fabricar un santo es costoso y por el Vaticano circula un dicho, “si quieres ser santo debes pasarte por el bufete del abogado Ambrosi”. En cuanto a los milagros Escrivá curo una “radiodermitis supuestamente cancerosa” que nadie externo y competente comprobó como tampoco sucedió con los 483 milagros de los santos que generó Juan Pablo II.
Me parece que la Iglesia Católica ha saltado cualquier limite de hipocresía y perversión. Su cometido es justamente lo que no hace y debería hacer, que es relatar la verdad histórica, la relación con otras formas de espiritualidad, introduciendo creencias razonables que permitan la convivencia y el ejercicio de los valores de una ética civil y laica. No deberían entrar en los asuntos que no conocen y de forma particular el los científicos ya que siempre que lo han hecho se han equivocado y han ocasionado graves daños. Bergoglio quiere “Una Iglesia pobre, para los pobres”. Nadie se lo puede creer ni siquiera como utopía
Javier García-Conde Brú
Catedrático de Medicina, Master en Bioética UCM