“Toda religión es política, como intento de imponer la ortodoxia y la ortopraxia en la vida social”. Élie Barnavi
Las Matrioskas son unas tradicionales muñecas rusas que tienen en su interior copias de tamaño progresivamente más reducido. Significan maternidad, vida eterna, amistad y amor. En cierto modo simbolizan, por su cobertura y pertenencia lo que expresa la Iglesia Católica y sus sectas. Esta Iglesia que tiene su referencia en el Imperialismo Romano y comete, en cierto modo, algunas de las acciones y perversiones de aquella epoca.
Una secta la componen personas que comparten diferentes elementos y que se mantienen aislados y menospreciados por no compartir rasgos importantes con la sociedad acerca de la percepción de realidad. Están en desacuerdo con el orden de la sociedad, limitan su libertad, tienen tendencia al secretismo y a la falta de argumentaciones, limitan sus lecturas y se someten a la manipulación de un líder que aspira a la santidad. Basan su fuerza mental en creencias, que consideran imposibles de argumentar, pero que son sin embargo fáciles de contrarrestar con el uso elemental de la razón y de la experiencia. Este planteamiento se basa en un proceso de fanatismo al que se llega a través de configurarse en una nueva familia súper procreativa que ofrece nuevas visiones sobre la interpretación de la vida y del Evangelio. Los lideres, en ocasiones descarriados, se transforman en ídolos al haber tenido apariciones generalmente de la Virgen que les han señalado el “camino” a seguir y les ha situado en un proceso de conversión que se inicio con Saulo de Tarso (luego San Pablo) cayendo del caballo en su camino a Damasco, como se describe en Los Hechos de los Apóstoles.
El fanatismo es una situación fundamental para explicar la adhesión incondicional de los socios y se basa en una imposición de ideas que consideran incuestionables, ejercen un deprecio a los diferentes, practican visiones sobre cuestiones sin alternativas y desconocen la deliberación al carecer de un espíritu critico. La tendencia a una alta procreación se basa en planteamientos sexuales, en los que ronda la idea de pecado y que impiden parejas de personas de sectas con la de una sociedad cívica, libre y responsable.
Dentro de las sectas aparecen lobbys, como equipos especializados en generar presión. El Vaticano informa de la presencia en la Iglesia, de lobbys más o menos activos de homosexuales, grupos de la Curia que incluso se enfrentan al Papa en cuanto perciben cambios mínimos en la ortodoxia, grupos que practican la impunidad ante situaciones de pederastia y otros centrados en los perversos negocios económicos de los dos Bancos del Vaticano. La homosexualidad ha sido ampliamente estudiada como un proceso biológico de la naturaleza humana, por lo que merece el máximo respeto, algo bien diferente que sea el denominador para la formación de un lobby. Cuando el Papa Bergoglio dice al mismo tiempo que el “no es nadie para juzgar a los gay “ pero que este es un fenómeno antinatural y lesivo para la humanidad porque no pueden procrear y porque Dios solo creo al hombre y la mujer, expresa un profundo desconocimiento e incoherencia y plantea un criterio sobre ¿quién los creo? y nos confunde sobre el criterio de la “creación a imagen y semejanza de Dios.
Las sectas aparecen por razones diversas. La Iglesia Española ha sufrido un gran desprestigio por su connivencia y reconocimiento con la dictadura franquista que incluso se permitió pasear al dictador de un genocidio bajo palio. Por otra parte los seminarios, las monjas de clausura, las monjas pseudoenfermeras, más caritativas que competentes o solidarias y otras congregaciones, se han reducido de forma alarmante debido a una Iglesia obsesionada con un pensamiento acrítico, un dogmatismo apartado de la realidad humana y con el sexo, que por otra parte significa un elemento básico en la pirámide del bienestar de Marslow. Al mismo tiempo un impenitente machismo ha segregando y minusvalorando a las mujeres y ejerce con una carencia absoluta de lo que significa la democracia en una organización que comparte con un fanatismo que imposibilita cualquier deliberación que han sustituido por slogans contradictorios e innecesarios. Decía Ghandi “lo que hacéis por mi, sin mi, es contra mi”. Recientemente hemos escuchado a un Papa que relaciona cristianismo y comunismo, que acoge a unas pocas familias de inmigrantes ante las miradas de las que se quedan, participa de repente en una incomprensible teoría económica sobre el destino de las cenizas e indica que las mujeres pueden dar de mamar a sus hijos en la calle, algo que a muchas personas nos parece natural y hasta hermoso.
El proceso de conversión de las personas que ingresan en una secta religiosa se caracteriza por una transformación radical de la identidad y de la orientación vital, camino de una abducción, que condiciona un cambio del elemento discursivo y del sentido de la realidad. Las ideas religiosas pasan a ocupar un lugar central en personas que tienen un yo dividido, con sentimiento de equivocación, inferior o infeliz, para pasar a estados de supuesta felicidad y seguridad. W. James definió la conversión como “Convertirse, regenerarse, recibir la gracia, experimentar la religión, adquirir una seguridad”. Recordando a Saulo de Tarso, este proceso se realiza de forma súbita, radical, dramática y de consecuencias psicológicas incalculables, en medio de una excitación emocional o perturbación de los sentidos, con separación entre la vida vieja y la nueva, con olvido del pasado y a la que alguna secta religiosa la califica como descarriada. De esta manera se genera un nuevo yo con características fanáticas y con deterioro de lo que significa la inteligencia intrapersonal e interpersonal de H.Gardner. Estas personas no buscan la veracidad cambiante de la realidad sociológica porque se sienten “estar en la verdad”. Algunas sectas como los Testigos de Jehová siguen un proceso de conversión gradual, sin dramatizaciones ni cambios bruscos basado en un intento de comprensión progresiva de los textos bíblicos como proceso gradual para el conocimiento de su propia Verdad.
Las sectas religiosas tienen objetivos compartidos, como el poder, confirmado al pasar sus estatutos por la aprobación del Vaticano en donde se integran, apropiación de sistemas educativos, con privilegios en colegios concertados, donde algunos se permiten incluso realizar separación por genero. Manipulan mentes desde edades precoces hasta incluso en la Universidad, tienen una obsesión por la economía, con constantes intentos de apropiarse de herencias ya que en este momento la “familia” es la secta. Los problemas sexuales y de relación se limitan a ellos mismos y desprecian la democracia interna porque abducidos y fanáticos han prescindido del pensamiento critico y los sumerge en una profunda incompetencia acerca de la realidad actual. La lectura significa la agresión fundamental a la ignorancia que han sustituido por periódicos como La Razón o TV como intereconomia o 13TV que con demagogia y falsedades les permiten reforzar sus inclinaciones políticas donde la corrupción intelectual no se percibe ni en sus propias casas.
De la Santa Sede, las sectas religiosas, han aprendido el secretismo, sobre delitos manifiestos mediante la formación de lobbys enemigos desde la propia Curia Vaticana y la obstinación por impedir las reformas. Los gastos fuera de control, responden a una absoluta anarquía de la gestión, con aparición de agujeros negros y perdidas de millones de euros en operaciones mal diseñadas, (personal, duplicación de actividades, irregularidades de origen clientelar. Como curiosidad el árbol de Navidad de la plaza de San Pedro que costó medio millón de euros) han obligado al Papa actual a realizar auditorias económicas, con el consiguiente enfrentamiento de los grupos implicados. Si como indica el Papa Bergoglio “la Iglesia para ser creíble debe ser pobre”, la previsión va para largo porque seria que la religión y el bien dominan y no el poder y el integrismo. Otra de las aspiraciones de las Sectas es que sus ídolos pasen a ser Santos y para ello se relacionan con la Comisión Vaticana COSEA que es considerada como una fabrica de Santos y Beatos a precios elevados y que como ejemplo en la época de Juan Pablo II generó 1338 beatos y 482 santos con sus correspondiente atribución de milagros, donde un caso raro o mal diagnosticado se transforma en milagro con el único juicio de médicos de las propia Comisión. El milagro es un hecho antinatural y los Colegios de médicos deberían analizar estas situaciones
Para manipular las conciencias y las consciencias de las personas, se empieza en su propia casa e intentan continuarla en los Colegios concertados y en la Universidad. Para referirme solo a la Comunidad Valenciana y como paradigma a la Universidad Católica, esta fue privilegiada por el Ayuntamiento anterior con solares y con acreditación por la ANECA sin valorar que carecían en el caso de Medicina de Hospitales para las practicas de los estudiantes con el consiguiente conflicto posterior. En esta Universidad y en todas las carreras se exige la asignatura Doctrina Social de la Iglesia o Pensamiento Social Cristiano que consta de 6 créditos (60 horas) igual a los que corresponden a la Anatomía Patológica. Me parece que es imposible contar una doctrina social de una Iglesia plagada de guerras, inquisición y delitos económicos y sexuales. Uno de sus temas es promover la igualdad de genero que representa el mayor grado de cinismo e hipocresía.
El profesorado de la Universidad Católica no tiene los requisitos ni las posibilidades para realizar en ella docencia, investigación y asistencia clínica y el Canciller es el Sr Antonio Cañizares que nombra y dimite según criterios inaceptables en una organización presumiblemente científica. Creo que el claustro de profesores, en donde hay algunas personas competentes, deberían revisar el currículo docente y abolir que en esa Universidad se retribuya en función de horas de clase.
La Inquisición se inicio con los Reyes Católicos y finalizó después de 300 años con Napoleón. El integrismo Católico tiene su referencia actual en la Congregación para la Doctrina de la Fe que procede del Art. 48 de la Constitución Apostólica de la Curia Romana Pastor bonus, creada por Juan Pablo II en 1988, que tiene como misión custodiar la correcta doctrina católica en la Iglesia. Esta Congregación procede de la Sagrada Congregación de la Romana y Universal Inquisición. Ya no pueden quemar por supuesta herejía y tampoco pueden convencer sobre la negación de la presencia de la Ciencia para la comprensión de los avances científicos realizados por las personas. La Iglesia siempre se equivoca, por fanatismo e incompetencia en las cuestiones científicas. Igual que erraron con Galileo, tendrán que aceptar la fecundación artificial, la eficacia de las células madre, determinas modificaciones del genoma para curar enfermedades y una parte de la inteligencia artificial
En el próximo articulo intentaré analizar algunas de las sectas que salen de la Mastrioska eclesiástica : Opus Dei, Camino Neocatecumenal, Legionarios de Cristo y Testigos de Jehová
Javier Garcia-Conde Brú, Catedrático de Medicina, Master en Bioética UCM